Mantelitos exclusivos.

¿Queréis sorprender a alguien  especial?

Yo os puedo echar una mano. Buscad unas tazas exclusivas, que tengan estampado un dibujo en el fondo, al igual que en el plato. Y, si os parece bien, yo puedo realizar el trasvase a la tela, como podéis apreciar en las dos fotos.  Podéis contactar conmigo en la dirección arriba indicada. Seguro que no os arrepentiréis. Ni de la idea, ni del resultado.

Una tabla de hacer queso, convertida en cuadro.

Nunca pensé que quedara tan original una vieja tabla de hacer quesos comprada en un anticuario. ¿Qué os parece? Una vez limpia y lijada, salió una madera robusta y sólida a la que quise añadir una banda decorativa, trabajada como si fuera un falso mosaico. Para realizar el dibujo me inspiré en uno romano. Una vez estampado, pasé una fina capa de betún de judea para que los colores semejaran el paso de los años, lo mismo que la madera. Aproveché dos de los orificios para colgarlo en la pared con unos cordones de algodón. En la otro foto se aprecia con nitidez el dibujo de la greca. El resultado: una idea única para hacer de su casa un sitio también exclusivo.

Cuadros con tela de gallinero.

¿Os gustan los animales?. Pues aquí tenéis dos de ellos: un pequeño gazapo y un gallo de plumas multicolores. Pintados ambos en acrílicos, sobre una tela de lino antigua, decoran una cocina. Para lograr mayor realismo en la composición, se puso una tela de gallinero y a los marcos se le dio un acabado rústico. Una idea más para alegrar la vista. Os muestro dos fotos más, porque he querido que veáis con precisión el colorido de las plumas o la mirada del gazapillo. ¿Os animáis?

Un postigo viejo.

¿Os gusta? Mirad qué bonito queda un postigo abandonado a su suerte. Lo limpìé, lo lijé y después apliqué una pintura en blanco roto. Para coordinar con el dibujo de pequeñas flores lilas, trazé una bandas del mismo color en los laterales. Puede ponerse en cualquier lugar, en exteriores o, incluso, dentro de la casa. Si tenéis alguno en circunstancias parecidas, intentadlo. En caso negativo, nosotros podemos realizarlo.

Un bolsillo para todo.

¿No sabéis dónde dejar los mandos de la tele, el libro de lectura, el móvil o las gafas? Pues para eso vale el bolsillo multifunción. Puede acoplarse al brazo del sillón o de la butaca y, aparte de decorar, tiene una finalidad práctica. Se puede presentar con detalles en pintura, como el de la foto. o bien se puede pintar el nombre o las iniciales de la dueña. O simplemente la leyenda "Cosas", como la que aparece en la otra fotografía.

Un cuadro lleno de posibilidades.

¿Tenéis por ahí una pizarra con imanes y ya estáis cansados de ella?. Pues yo os doy la siguiente idea: reunid varios retales de tela de diferentes dimensiones y los pintáis. O bien podéis recortar algunas flores-o lo que tengáis más a mano- y las coséis a la tela con un zigzag muy apretado. Una vez elegidos y terminados los motivos se les aplica una tela adhesiva por detrás para que adquieran cuerpo. Después se distribuyen por la pizarra de manera aleatoria y se sujetan con los imanes. El resultado puede ser éste: yo he seleccionado dos bodegones de flores, en sendos floreros, y otros cuatro motivos más pequeños.Dos de ellos llevan unas aplicaciones de flores cosidas y los otros dos una micro-pintura que representa dos platos de loza antigua con unas iniciales. El fondo de los dos bodegones de flores se ha conseguido tiñendo la tela con té. ¿La nota original? Pues la sensación de encontrarnos con un cuadro abierto a tantas posibilidades como cambios se quieran realizar.

Flores secas sobre un libro.

Realizado con pinturas acrílicas, he pretendido captar la luz y su efecto sobre unas flores secas posadas en un libro, aún por escribir. El soporte es un tablé de madera, previamente lijado. La luz ilumina la zona central, quedando en una suave penumbra el resto de la composición.

Un cojin realizado en tela con detalles de piel.

Hoy os traigo un nuevo trabajo: un cojin realizado en tela fuerte de abrigo, con detalles en piel, en concreto dos margaritas. Además, he completado el conjunto con una frase bordada en lana, con una cadeneta muy fácil de hacer. Por el perímetro del cojín he pasado un bies hueco, al que le he dado un poco de vuelo en las puntas. Espero que os guste. Ya os iré presentando más.

Estudio del interior de una caracola.

Se trata de un cuadro pintado con acrílicos, en donde el motivo central es mostrar las secciones en las que está dividido el interior de una caracola. Ésta aparece rodeada de una bruma, de la cual parece emerger. Además, contribuye a crear una atmósfera evanescente, remarcada por la gama de colores cálidos que se han utilizado para su ejecución. Este tipo de pinturas crean rincones acogedores y muy personales. Puedo realizar variaciones, según el gusto del cliente, o de la zona en donde vaya a ubicarse.

La piru Palomita.

La piru Palomita es otra de mis  creaciones. Lleva trenzas, y una visera de lino. Las bermudas también son de lino y la camisa de hilo, ambos con unos dibujos de aros, realizados con pinturas acrílicas. Se complementa, además con un bolso de piel de ante. En su interior lleva "Le petit Prince", una miniatura encuadernada en piel. Además, un pañuelo de seda natural y un cordón y una pulsera de piel. En la última foto aparece el librito en el que se acredita su exclusividad y el logo de esta serie de muñecas.

Más bolsas.

Os traigo una bolsa más, confeccionada con una tela, de las que utiliza la casa Chanel para elaborar sus trajes. En la primera instantánea se observa cómo es, forrada con otra  de margaritas en su interior. Lleva un doble cierre de cordones verde. Además, se complementa con la palabra "cosas", bordada en lana y de unos pequeños detalles, que simulan flores, hechos de la tela estampada y de piel granate. Un punto chic.

La piru Sarita.

Por fin, la piru Sarita está terminada. Como observáis en las fotos, aparece en su cuadro caja, con el fondo en tonos ocres. En una de las fotos se ve con más detalle la gabardina, que lleva un forro estampado de flores. La he querido dejar en una percha para que se pueda ver mejor el vestido de punto, tricotado a mano, como todo lo demás. Además aparece acompañada del librito de presentación, que acredita que es única.

Una mantelería que invita a soñar.

Es una mantelería muy especial, como las personas a las que está dedicada. Siguiendo el dibujo estampado en la porcelana, he intentado sugerir  el mar y su magia, en una gradacíon de azules y blancos, que resaltan sobre el fondo grisáceo de la tela.

El armario de la abuela.

El armario de un cuerpo de las abuelas se ha convertido en un mueble para guardar complementos. Estaba muy deteriorado, así que el trabajo fue duro. Se eliminó toda la pintura negra que lo recubría y, una vez limpia la madera, se le dio una capa de cera de anticuario. También se cambió la puerta por un cristal transparente para poder ver mejor el interior. Éste se enteló por paneles con una tela estampada en tonos azules y blanco, acorde con el color de la habitación. También se hizo lo mismo con el cajon, que se utiliza para guardar la ropa de cama. En estas dos fotos se puede apreciar en su totalidad por fuera y por dentro. ¿Os gusta? Si tenéis alguno en similares circunstancias, nosotros podemos rehabilitarlo. Así contaréis con un mueble personalizado y, además, con un recuerdo inigualable.

Otro cojin tridimensinal.

En esta otra foto aparece otro cojin con la misma técnica. Os lo muestro en el momento intermedio de su ejecución. Para fabricar la flor al aire he utilizado una tela fuerte con un estampado de bañeras. Me he centrado en el color de la bañera, la misma que ilustra la maceta, para intentar sugerir las hojas de una flor. La tela del fondo es una tela suave, parecida al lino. Como remate, un cordón, forrado de la tela estampada. Más adelante os mostraré el efecto final.

Un cojin en tres dimensiones.

Ahora os voy a mostrar uno de mis cojines favoritos. Lo llamo cojin en tres dimensiones, porque lleva una flor al aire. Además se complementa con botones y un mensaje bordado en hilo, tipo cadeneta. La maceta también puede ser un bolsillo. En este caso no lo es, pero se puede dejar sin pegar la parte superior, siempre según el gusto de cada cual y la utilidad que se la vaya a dar. Está confeccionado, además, con una tela antigua, tejida en telar.

De tal palo tal astilla.

Con la misma tela utilizada para confeccionar el cojin, he elaborado esta bolsa que, como reza en el bordado, puede servir para guardar múltiples cosas. Las letras se rematan con unas pequeñas flores realizadas con las dos telas, la lisa y la estampada. Se cierra con una doble cinta, muy fácil de manipular. Qué os parece?

Una de trapos.

Con un trozo de tela y mucha imaginación puedes romper moldes. Por ejemplo, he utilizado para la confección de un cojín una tela que, en principio, no está pensada para ello, porque se trata de una pieza fuerte para ropa de abrigo. Sin embargo resulta muy cálida para el invierno. Como nota decorativa he ideado un dibujo hilvanado con lanas de diferentes colores, acordes con el retal de tela fina que simula una maceta. Y para remarcar el borde y hacer, de paso, la jareta, he pasado el doble hilván alrededor del cojín. ¿Os gusta?

Las meninas meninas.

Esta es otra interpretación del famoso cuadro de Velázquez. He captado solo las figuras centrales del cuadro, obviando las demás. El fondo y el suelo se han modificado, aunque las ropas son una réplica de la pintura. Pueden, además, elaborarse de maneras diferentes, según los gustos de aquellos que deseen una.

Meninas

Otras de mis aficiones es pintar. Sobre cualquier soporte: tela, lienzo, madera, latón, pared, etc...

A veces recreo temas de autores consolidados. Esto es lo que me pasa con la obra de Velázquez. Creo, sobre esa base, series limitadas de cuadros, cojines, o  bolsas...Incluso pueden ir estampadas en ropas. El cuadro representa a Mariana de Austria. Está realizado en acrílicos y, como nota discordante, aparece sin cara,  porque puede ser todas y ninguna a la vez. Más adelante os mostraré otras.

Restaurar y reciclar muebles antiguos.

En las fotos aparecen una artesa convertida en pequeño expositor de utensilios de té y una maleta pequeña, entelada por dentro y a la que se le pueden dar diferentes utilidades. Nosotros restauramos estas piezas, según las indicaciones del cliente. Los acabados son de anticuario y el entelado puede variar, dependiendo de la ubicación de la pieza. Las telas deben tener una textura fuerte para evitar infiltraciones de la cola que se aplica para pegarla a la madera. El precio se pacta con el cliente después de hacer una valoración exhaustiva del prabajo. Opcionalmente puede llevar pintura decorativa.

Trampantojos sobre latón y madera

El latón puede ser un soporte fácil de pintar. Como observáis, se ha querido reproducir un paño y el efecto de las puntillas sobre una parte del cántaro de aceite. En la segunda foto, aparece  una bovina de hilo de seda sobre una tapa de madera de una máquina de coser antigua. La tapa aparece en su totalidad en otra de las fotos, así como otro de los detalles, un imperdible que sujeta la bovina, en la última de esta página.

Mantelería de flores y frutos extremeños.

Aquí tenéis otro de los trabajos que realizo. Es una mantelería pintada a mano, formada por una corona de flores y frutos de Extremadura. Las servilletas van a juego, representando individualmente los motivoss del aro central. El dibujo se adapta a todas las medidas. Además, en este caso, forma parte de la configuración central de esta página.

Bolsas para los zapatos.

Mirad estas dos bolsas para guardar zapatos. Están confeccionadas en una tela exclusiva. La primera la muestra al completo. En la segunda, la tela se ha dejado en el interior y por fuera se ha completado con una tela de lino, a la que se le ha añadido un dibujo extraido de la tela. Por el contrario, la primera lleva un forro en el interior de listas verdes y naranjas. Se pueden realizar según el gusto del cliente.

Bolsas para libros electrónicos

Os presento una novedad. Fundas para los libros electrónicos. Confeccionadas a medida, con un enguatado para amortiguar golpes y doble forro.

Piru Rosita.

Se llama Rosita y es una de las últimas muñecas Piru que he creado. El bolso es de piel y va forrado de la misma tela que el vestido. El chaleco y los calentadores están tricotados a mano. Como adorno lleva unos troquelados de papel en la base del cuadro. Mirad los detalles de la diadema y de los zapatos,también de piel.