Como es época de regalos, os propongo uno personalizado. Siempre que puedo me gusta sorprender con algo que tenga seña de identidad. Eso es lo que he perseguido al elaborar estas bolsas. Van confeccionadas en una doble tela: La exterior es lisa para no tener problemas a la hora de pintar los nombres a los que va dirigido el regalo. La interior reproduce logos de marcas de vino. La he elegido así porque en su interior va una botella. Como detalle original, el cordón, trenzado a mano, va rematado con tapones de corcho. En dos de ellos pinté un racimillo de uvas. En los otros dos las iniciales del otro homenajeado. ¿Qué os parece?
Por lo demás, desearles a Germán y Alfonso que lo disfruten tanto como yo al idearlos.
Pero qué idea la de los tapones. me encanta.
ResponderEliminarAsí, es una manera más de reciclarlos. Gracias y feliz año.
ResponderEliminarDos regalos bien bonitos!!
ResponderEliminar¿A que sí? Como siempre, personalizados. Besos.
ResponderEliminar