Mirad esta repisa. Es antigua, de las de antes. Cuando me hice con ella estaba muy deteriorada, con varias capas de pintura que tuve que retirar poco a poco. Una vez lijada apliqué cera de anticuario y la pulí. El resultado es muy gratificante, como podéis observar por las fotos. En la primera se ve la madera con un brillo y un acabado muy especiales. En la segunda, parte de una colección de campanas que, por su acabado entre rústico y sofisticado, casan a la perfección con la repisa.
¿Os atrevéis con una parecida?
Preciosa, ideal para mi pisito, lo mismo un día te la quito jajaja
ResponderEliminarBueno, si te viene bien...Será por pingos. Besitos.
EliminarMuy bonita purichi,te harían falta unas cuantas para poder colocar la multitud de campanas de tu colección,eh?muakkk
ResponderEliminarPues más bien sí; es lo que tiene pasarse con las colecciones. Pero yo feliz a pesar de tanto cachivache. Besos
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