Os adelanto la entrada de mañana miércoles. 

Se trata de un cuadro pintado con mucho cariño. Un cuadro especial para una ocasión especial. Me inspiré para realizarlo en una foto preparada por Pinafili, vuestra blogera de moda. Espero que le guste a la persona agraciada en el sorteo. En esta ocasión, el soporte ha sido el papel, similar al de las acuarelas. Y la pintura, acrílicos diluidos en agua. Trabajé primero el fondo, aplicando manchas lilas a la izquierda del cuadro, como reflejo de algunas de las flores. En la otra parte, en donde se refleja mejor la claridad, apliqué blancos y beiges, para acentuar más el contraste. Por lo que se refiere al bouquet, en el que predominan flores silvestres, recién recogidas del campo, lo trabajé con unas pinceladas muy sueltas. Unas cuerdas, apenas insinuadas en el cuadro, son su colofón.

El marco, rosa-chicle, le aporta un cierto aire  de modernidad y supone, además, un puente de unión entre lo clásico y estas nuevas tendencias.

¿Qué os parece?